Se nos ocurre el regalo perfecto para el Día de la madre, que ya está ahí, o si no, para otra ocasión especial: un cumpleaños, un aniversario, o simplemente para darle una sorpresa a esa persona tan especial para nosotros. ¿Por qué no regalar un viaje?, sí, un viaje de unos días a ese lugar al que siempre deseó ir. Seguro que le sorprenderá y le hará una gran ilusión, porque es un regalo diferente que, a su vez, contiene otros muchos regalos y sorpresas, ya que hablamos de conocer un sitio nuevo, de hacer visitas culturales, de hacer excursiones y admirar paisajes desconocidos, o simplemente, de descansar y desconectar: ¡un soplo de aire fresco para nuestra monótona vida!. ¿A quién no le gustaría un regalo así?.

Y además es un regalo que podemos organizar rápidamente, ya que hoy en día, viajar no es lo que era antes, todo es más fácil, y está al alcance de la mano. E internet nos facilita la tarea, se puede pensar en un destino y buscar una guía que nos aconsejará qué lugares visitar, nos hablará un poco de la historia y la cultura, de las actividades que se pueden realizar en las fechas en las que vamos…Pero, sobre todo, en internet podemos comprar los billetes de avión, de tren o de autobús, y si se hace con antelación, a precios realmente interesantes. Y, por supuesto, se puede también reservar el alojamiento: desde hoteles hasta casas rurales.

A veces, pensamos que es muy complicado desplazarse a otros países, y que es mejor ir ahí al lado y conocer lo que tenemos cerca. Y no decimos que no es cierto, ya que lo que tenemos al lado lo descuidamos o lo olvidamos. Pero el poder ir a otro país y conocer su cultura, sus gentes, sus monumentos, sus fiestas…es siempre de un gran atractivo. Y tampoco hay porqué cruzar el Atlántico o recorrer miles de kilómetros para hacerlo; tenemos países muy cerca, vecinos como Portugal o Francia que alguna gente no conoce y que valen la pena. U otros a los que siempre hemos deseado ir, como Italia, en donde en cualquier ciudad puede uno perderse y viajar en el tiempo, ya que están llenas de historia y monumentos impresionantes. Los canales y el encanto de Venecia, la famosa torre inclinada de Pisa, la fascinante ciudad de Roma,  o la belleza de Florencia. Sin olvidar los paisajes increíbles de las costas italianas, como la maravillosa isla de Sicilia. También hay ahora destinos que están muy de moda de lugares que en otro tiempo no muy lejano fueron arrasados por la guerra, y que hoy intentan mostrar de nuevo al mundo la belleza de sus costas, los siglos de cultura e historia que se encuentran en sus calles y edificios, como es el caso de Croacia, Eslovenia y también otros países del este.

Para esos países que tenemos más cerca, como por ejemplo Francia, existe una guía muy interesante y completa, blog-francia, que nos habla sobre todo lo que podemos ver y hacer en el país vecino. Los lugares más visitados, como París, una de las capitales europeas más bellas, la ciudad de la luz y del amor, con sus impresionantes y famosos monumentos: la Torre Eiffel, Nôtre Dame y el Museo del Louvre; o el grandioso Palacio de Versalles, a unos kilómetros de París, así comio Eurodisney, destino ideal para los más pequeños; el Monte St Michel entre Normandía y Bretaña, un lugar excepcional que se encuentra en el medio del mar; los famosos Castillos del Loira, que en realidad son auténticos palacios renacentistas; y, ¿cómo no? los Pirineos y los Alpes, adonde pueden ir los amantes del ski y de la montaña. Sin dejar a un lado todas las interesantes ciudades francesas como Burdeos, Lyon, Montpellier, Orleans…

Pero para los que quieren visitar el sur de Francia porque lo tienen más a mano, está la guía de La Provenza, que nos sugiere lugares excepcionales como el Pont du Gard, un acueducto romano perteneciente al Patrimonio Mundial de la Unesco; la Reserva nacional de Sigean, un parque zoológico de grandes dimensiones; el Palacio de los Papas en Aviñon; las encantadoras ciudades de la Costa Azul: Cannes, famosa por su festival de cine, Niza o Mónaco; por no hablar de los pequeños pueblecitos provenzales de piedra, lugares de gran encanto donde podemos encontrar desde artesanos ceramistas, vendedores de lavanda o aceituneros y vinateros de renombre.

En cualquiera de estas guías, se podrán hacer reservas de aviones o trenes; de alojamientos, que en Francia pueden ser muy atractivos, ya que existen desde hoteles, pasando por las llamadas gîtes o bed and Breakfast, hasta casas rurales de gran encanto; así como alquileres de coches. Además, también se pueden comprar entradas para museos o para lugares como Disneyland Paris, para conciertos, e incluso para dar paseos en ferries. Desde luego, son guías de lo más práctico para organizar bien el viaje.

Si quiere hacer un regalo original en el Día de la Madre o en otra ocasión que merezca la pena, regale un viaje, algo que no dejará indiferente a nadie, algo que puede ser compartido, y que, por supuesto, será un regalo inolvidable, lleno de recuerdos, ¡el regalo perfecto!.