Los paneles fotovoltaicos están por todas partes, incluso en el último teclado sin cable de Logitech. En la era de las pantallas táctiles, los teclados resisten, ya que todavía son indispensables para trabajar con los ordenadores. Aunque últimamente hay versiones más ligeras, ergonómicas y sin cables. Sin embargo, eso ha tenido como consecuencia que los teclados han pasado a depender de las pilas, que hay que cambiar o recargar cada dos o tres meses, según los modelos. Para liberarse de ellas, la marca suiza Logitech acaba de lanzar su primer teclado alimentado por dos pequeños paneles solares, que puede ser el regalo ideal para cualquier persona que utilice el ordenador a todas horas.
De hecho, la palabra solar no es en realidad la apropiada, ya que el teclado de un ordenador se usa mucho más bajo la pálida luz de una lámpara de oficina que a la luz del día. Sería mejor hablar de células fotovoltaicas. El fabricante afirma que la iluminación normal de una oficina es suficiente para alimentarlas, y que incluso se mantiene cargado tras haber pasado tres meses en la oscuridad total, lo cual no suele ocurrir en las oficinas.
Con un diseño clásico en plástico blanco y negro, el Logitech K750 tiene el tamaño de un teclado normal (42×16 cm), aunque es más fino (7,5 mm) ya que no necesita pilas, como sus competidores. Las teclas, muy planas, se inspiran en las de los ordenadores portátiles, pero son más grandes y ligeramente curvadas, lo que limita el riesgo de error y las hace más agradables al tacto. Por otra parte, para conectar el teclado inhalámbrico no es necesaria la tecnología Bluetooth, sino que hay que enchufar al ordenador una llave USB minúscula, que sirve de receptor. El teclado es reconocido inmediatamente sin necesidad de instalar ningún programa. Sin embargo, Logitech ha desarrollado una aplicación que puede descargarse por internet con la que se puede ver en la pantalla, simplemente pulsando una tecla, el nivel de recarga y la luminosidad de la que dispone el teclado.
Además, hay que decir que Logitech no destina este modelo de teclado inhalámbrico para los ordenadores de Apple, para los que no se han hecho programas; de todas formas, se ha probado el K750 en un iMac reciente y ha funcionado. Por lo tanto, los usuarios de Apple también podrían hacerse con un teclado sin cables.
En definitiva, ¡he aquí un buen regalo para los amantes de la informática, que están siempre al tanto de los avances tecnológicos en el mundo de los ordenadores!.
Pros.
No necesita pilas.
La luz de una lámpara de mesa es suficiente para cargar el teclado.
La carga puede durar tres meses.
Para ordenadores PC y funciona también en ordenadores Mac (aunque no haya programas dirigidos a los ordenadores de Apple).
Contras.
Precio de momento un poco alto, aunque tal vez compense por el ahorro de energía que se hace por otro lado.
Pequeños detalles como que las lenguetas que sirven para inclinar el teclado no parecen muy sólidas.
El teclado no tiene un piloto de luz que indique cuando la tecla de las mayúsculas está encendida -tal vez se trate de una concesión al ahorro de energía-.