Si pensamos en regalos tradicionales de San Valentín rápidamente vendrán a nuestra cabeza bombones y flores. Regalar flores en San Valentín es una práctica que hace unos años cayó en desuso ya que se consideraba propia de aquellas personas faltas de imaginación, de quiénes no sabían que regalar y cuya originalidad les llevaba año tras año al mismo ramo de flores para San Valentín.
Las flores no tienen la culpa de esta falta de originalidad generalizada del 14 de febrero. Un bonito ramo de flores puede ser un estupendo regalo de San Valentín. Además, gracias a internet, las flores en San Valentín se convierten en una forma estupenda de salvar la distancia. Si nuestra pareja se encuentra lejos, podemos encargar un envío de flores con una tarjeta personalizada.
Cuando pensamos en regalar flores para San Valentín, nos viene a la mente el concepto de chico regala a chica. Esto es algo que si debería quedar en el pasado ya que la flores son un bonito regalo independientemente del sexo de la pareja.
Y si bien es cierto que para el 14 de febrero las rosas suben de precio, no tenemos porque hacernos de un gran ramo. Una única flor puede causar el mismo efecto si se sabe regalar con buen gusto.